Bal Harbor, Florida. - – Seis días después del devastador colapso del condominio Champlain Towers South en Surfside, los familiares de las víctimas, voiluntariamente, son llevados al lugar de la tragedia, además de contar con un lugar para realizar reuniones informativas familiares.
El lunes, una línea de autobuses salió del Grand Beach Hotel en Surfside y llevó a los miembros de la familia al Seaview Hotel en Bal Harbour, sede del nuevo sitio de las reuniones informativas familiares diarias que se llevan a cabo en privado con los funcionarios.
También el lunes se realizó una vigilia, donde más de 200 personas, en su mayoría desconocidos, se dieron la mano en la arena. Aquí, llevaron a cabo una vigilia de oración por las familias que luchan por mantenerse positivas.
“Puedo sentir el dolor que tiene la familia”, dijo un asistente a la vigilia.
De regreso en el lugar del colapso, los miembros de la familia que no habían ido, fueron llevados en autobuses para que lo vieran por sí mismos.
“No he perdido la esperanza ni la fe”, dijo Martin Langesfeld, hermano de Nicole Langesfeld, de 26 años, que sigue desaparecida junto con su esposo, Louis Sadovnic.
La pareja de recién casados vivía en la unidad 804 de Champlain Towers South
“Sé que ella todavía está allí”, dijo su hermano. “Lo sé. Sigue peleando niña... sigue peleando, te estamos esperando “.
Para los familiares de las víctimas, estar lo más cerca posible de la tragedia es suficiente para ayudarlos a procesar sus emociones y exactamente lo que está sucediendo.
“Pudieron, algunos de ellos, sentir que estaban más cerca de los miembros de su familia”, explicó Maggie Castro de Miami-Dade Fire Rescue. “Algunos de ellos, vieron lo que necesitaban ver para quizás, comenzar a procesar información que, hasta ahora, ha sido difícil de aceptar”.
Desafortunadamente, como es el día seis en la misión de búsqueda y rescate de los rescatistas, las familias se están cansando y su fe está siendo probada.
“Las posibilidades de que encontremos a alguien con vida están disminuyendo con cada hora que pasa, pero siempre mantendremos la esperanza, y todavía estamos en una misión de rescate”.
Afortunadamente, la ayuda para estas familias ha venido de todo el mundo, incluso, un grupo de Israel especializado en traumas, quienes pueden ayudar a las familias tanto como sea posible.
“La espera, el no saber, conduce a esa sensación de impotencia”, explica Rachel Poch, de la Unidad de Trauma Psicológico de United Hatzalah de Israel.