TAMARAC, Fla. — El alguacil del condado de Broward, Gregory Tony, dijo el viernes que sus agentes tuvieron “toda la oportunidad” de salvar vidas durante un triple homicidio ocurrido en febrero en Tamarac, pero fallaron, anunciando que seis agentes han sido despedidos y otros trece disciplinados tras una investigación de asuntos internos.
“Tuvimos la oportunidad de salvar la vida de esa mujer y fallamos”, dijo Tony durante una conferencia de prensa. “Cualquiera que tenga una placa y un arma y piense que eso es aceptable puede renunciar hoy”.
Reporte de las 6 p.m.:
Las medidas disciplinarias se derivan de la respuesta a un tiroteo ocurrido el 16 de febrero, cuando las autoridades dicen que Nathan Gingles, de 43 años, mató a tiros a su esposa separada, Mary Gingles, de 34 años, a su suegro David Ponzer, de 64, y al vecino Andrew Ferrin, de 36.
Registros judiciales muestran que Mary había obtenido una orden de restricción y reportado repetidamente amenazas a los agentes del Departamento del Alguacil de Broward (BSO, por sus siglas en inglés) en las semanas previas a los asesinatos.
Los seis empleados que fueron despedidos fueron identificados como el sargento Travis Allen, la agente Brittney King, el agente Daniel Muñoz, el agente Lemar Blackwood, el agente Eric Klisiak y el sargento Devoune Williams.
Los agentes Dia Cross, Eric Baldy, Daniel Lovallo y Daimeon Nelson recibieron suspensiones de 10 días. La agente Sophie Riggs recibió un aumento de suspensión de cinco a 15 días y fue puesta en entrenamiento criminal, mientras que la agente Ilany Cebalos fue suspendida por cinco días. Las acusaciones contra otros dos agentes fueron desestimadas.
Tony mostró una cronología de los hechos, en la que se observa cómo los agentes se posicionaron cerca en lugar de avanzar hacia la casa mientras Mary corría por su vida.
Un vecino que llamó al 911 reportó haber escuchado disparos y gritos. Los investigadores descubrieron que los agentes permanecieron en sus vehículos por más de 20 minutos antes de acercarse a la escena.
“Eso no está dentro de las políticas, no es lo que entrenamos”, dijo Tony, señalando que la política de tirador activo de BSO requiere que los agentes intervengan de inmediato para proteger vidas. “Los segundos importan. Son la diferencia entre la vida y la muerte”.
La revisión interna de BSO incluyó 47 declaraciones juradas y horas de videos de vigilancia y del vecindario.
Tony dijo que las fallas comenzaron con los agentes que manejaron los reportes previos de violencia doméstica de Mary, pero los errores más graves ocurrieron el día de los tiroteos, cuando los agentes no intervinieron mientras Gingles mataba a su esposa y al vecino después de asesinar a Ponzer en el patio trasero.
El presidente del sindicato de agentes, Dan Rakofsky, no estuvo de acuerdo con la decisión de Tony, y dijo que el caso no debería haberles costado el trabajo a los agentes.
“Cada uno de estos casos será escuchado en arbitraje”, dijo Rakofsky. “Estamos seguros de que los hechos demostrarán que nuestros miembros no podían haber hecho nada diferente para cambiar el trágico resultado de ese día”.
El tío de Ferrin, al reaccionar ante los resultados de la investigación, dijo que la rendición de cuentas era importante, pero cuestionó si conduciría a un cambio.
“No me devuelve a mi sobrino”, dijo. “Se cometieron errores y se perdieron vidas. Me alegra que haya rendición de cuentas, pero ¿va a cambiar algo?”
Tony enfatizó que la agencia debe aprender del incidente.
“Acepto la responsabilidad. Estoy aquí para asumir la responsabilidad de lo que sale mal”, dijo Tony. “Esto realmente me molesta. O fueron incompetentes en ese momento o simplemente cobardes. Les aseguro que, de ahora en adelante, seremos mejores”.
Nathan Gingles, un veterano militar de EE.UU., fue arrestado tras un tenso enfrentamiento, durante el cual los agentes dijeron que lo vieron caminando con su hija Seraphine, de 4 años, descalza. Los detectives creen que la niña presenció los tiroteos.
Imágenes de la cámara corporal obtenidas por Local 10 News en abril muestran cómo fue derribado y arrestado por agentes de Broward en el Walmart ubicado en el 7900 de W. McNab Road en North Lauderdale el 16 de febrero. Estaba con Seraphine en el momento del arresto.
“No te muevas ni un p... segundo”, le dice un agente de BSO a Gingles en el video. “Te van a disparar”.
Tony dijo que habló con las familias de las víctimas el jueves y les dijo que el departamento asume toda la responsabilidad por la muerte de sus seres queridos.
“Esto no fue un fallo organizacional ni administrativo”, dijo Tony. “Se trata de asegurarnos de mejorar e invertir nuevamente en nuestra gente”.
“Acepto la responsabilidad. Estoy aquí para asumir la responsabilidad de lo que sale mal”, agregó. “Esto realmente me molesta. O fueron incompetentes en ese momento o simplemente cobardes. Les aseguro que, de ahora en adelante, seremos mejores”.
Nathan Gingles permanece detenido en la cárcel principal del condado de Broward por tres cargos de asesinato en primer grado, secuestro y otros cargos. Aún no se ha fijado la fecha de su juicio.
Los fiscales del condado de Broward dijeron en marzo que buscarán la pena de muerte para Nathan Gingles.
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