CONDADO DE MIAMI-DADE, Fla. — — ¿Comería usted en un restaurante con casi 50 infracciones?
Las inspecciones rutinarias de seguridad alimentaria del Departamento de Regulación Comercial y Profesional de Florida tienen como objetivo proteger al público, pero lo que los inspectores encontraron recientemente en varias cocinas del sur de Florida fue alarmante.
Se trataba de inspecciones rutinarias sin previo aviso, con la excepción de una visita basada en una queja en North Miami Beach.
No se ordenó el cierre inmediato de ninguno de los restaurantes, pero la gran cantidad de infracciones (49, 48, 47 y 31) es inaceptable.
Se han ordenado inspecciones de seguimiento para todos ellos.
CHICKEN HOUSE #4 – 1061 NW 20TH STREET, MIAMI
49 infracciones – 14 de octubre (Inspección de rutina sin previo aviso)
Los inspectores documentaron 49 infracciones dentro de Chicken House #4 durante una visita reciente, una de las cifras más altas registradas este año.
El informe de inspección describió una acumulación de una sustancia negra y verde similar al moho dentro de la máquina de hielo, moscas de la fruta revoloteando alrededor del área de preparación y una orden de suspensión de venta tras el hallazgo de varios alimentos a temperaturas peligrosamente altas. Entre ellos se incluyen queso cheddar a 10 °C, pollo cocido a 9 °C, frijoles a 19 °C y carne cruda a 14 °C.
Un empleado informó a los inspectores que la comida había estado allí desde la noche anterior.
Las paredes y los pisos estaban sucios de grasa y escombros, y los recipientes de comida, las boquillas de los dispensadores de bebidas y el interior de la máquina de hielo estaban sucios y viscosos. Los inspectores también descubrieron alimentos almacenados en el exterior, en una hielera portátil que no había sido aprobada por el estado. Los empleados no podían explicar los procedimientos adecuados de desinfección y el restaurante operaba con una licencia vencida, renovada solo tras la llegada del inspector. Ningún empleado contaba con capacitación vigente en seguridad alimentaria.
SMOKI – 1970 NE 153RD STREET, NORTH MIAMI BEACH
48 infracciones – 29 de septiembre (Inspección basada en quejas)
Una queja de un consumidor motivó esta inspección y los inspectores rápidamente descubrieron el motivo.
Se observaron cucarachas vivas arrastrándose por una mesa de preparación y la pared de un baño. Otra fue encontrada muerta en el suelo de la cocina. Las áreas de almacenamiento estaban sucias y desorganizadas, con las paredes cubiertas de grasa y polvo.
Los inspectores encontraron frascos de medicamentos almacenados en los estantes de preparación de alimentos y observaron a un empleado manipular salmón ahumado con las manos descubiertas, sin lavarse. El restaurante no contaba con un plan aprobado que permitiera el contacto con las manos descubiertas.
Se emitió una orden de suspensión de venta cuando se encontraron cebollas envueltas en una toalla no apta para uso alimentario, y se emitieron órdenes de suspensión de venta adicionales para salmón, atún y queso crema envasados al vacío, elaborados en el local sin autorización estatal. El establecimiento también ahumaba pescado sin la variación de proceso requerida, lo que representaba una infracción reiterada.
Las superficies y recipientes en contacto con alimentos estaban oxidados y sucios, y los cuchillos se almacenaban sobre una banda magnética sucia. Los inspectores también citaron al restaurante por no contar con un gerente de alimentos certificado ni con una advertencia al consumidor sobre el salmón y el atún crudos en su menú.
EL CHURRASCASO BRAZILIAN GRILL – 20505 S. DIXIE HIGHWAY, CUTLER BAY
47 infracciones – 13 de octubre (Inspección de rutina sin previo aviso)
Dentro del centro comercial Southland, El Churrascaso Brazilian Grill registró 47 infracciones durante una visita de rutina.
Los inspectores encontraron excrementos de roedores sobre los recipientes de jarabe y alrededor de 20 insectos voladores vivos en las áreas de almacenamiento en seco, fregadero y lavavajillas. Dos latas de insecticida Raid, etiquetadas para uso doméstico, se almacenaban sobre las mesas de preparación de alimentos.
Se emitió una orden de suspensión de venta para tomates cortados, queso feta, col rizada y camarones almacenados a temperaturas peligrosas. La máquina de hielo, el exprimidor de naranja, el abrelatas y las boquillas de los refrescos estaban cubiertos de lodo y residuos, y el interior del horno estaba negro de grasa. Los techos, las rejillas de ventilación y las paredes de toda la cocina estaban cubiertos de polvo y una acumulación similar a moho.
Los inspectores observaron un cuchillo y herramientas de afilar almacenadas en un estante sucio, un lavabo de manos que drenaba lentamente y ningún jabón disponible para los empleados. Un trabajador preparaba comida sin protección para el cabello.
147TH AVENUE, WEST KENDALL
31 infracciones – 13 de octubre (Inspección de rutina sin previo aviso)
En West Kendall, El Platoneeka recibió una sanción por 31 infracciones durante su inspección de rutina.
Se encontró moho en la máquina de hielo y el dispensador de refrescos, y los recipientes de comida estaban agrietados o rotos. Los inspectores observaron pollo crudo almacenado encima de carne de cerdo cruda en la cámara frigorífica. Se observó repetidamente a empleados sin lavarse las manos: uno tosió y siguió trabajando, otro bebió de una botella y otro volvió a entrar a la cocina desde afuera sin lavarse.
El lavamanos de la cocina no funcionaba y no había jabón disponible en ninguna parte.
Los inspectores también documentaron artículos personales de los empleados en las mesas de preparación, comida destapada y falta de comprobante de la capacitación requerida en seguridad alimentaria. Un empleado lavó y enjuagó utensilios de cocina sin desinfectarlos antes de volver a usarlos.
La inspección señaló graves deficiencias en la supervisión de la gerencia y en la higiene básica.
EN RESUMEN
Los restaurantes deberían esforzarse por lograr cero infracciones, no 49, 48, 47 ni siquiera 31.
No se trata de problemas de papeleo, sino de problemas que pueden enfermar a los clientes. El moho en las máquinas de hielo, las temperaturas peligrosas de los alimentos, los insectos y que los empleados no se laven las manos son claras señales de negligencia y mala gestión.
Los cuatro restaurantes se enfrentan ahora a inspecciones de seguimiento, pero la pregunta sigue en pie: ¿Comería usted en un restaurante con tantas infracciones?
Cuando la gerencia permite este tipo de condiciones, dice algo sobre sus prioridades, y no es la seguridad de sus clientes.
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