FORT LAUDERDALE, Fla. — Dos hombres se encuentran bajo custodia federal después de que integrantes de la selección nacional de fútbol de Colombia, que se encuentra en el sur de Florida para un partido amistoso contra Nueva Zelanda en el Chase Stadium, denunciaran haber sido seguidos por un vehículo sospechoso el jueves.
Uno de los jugadores, que pidió no ser identificado, contó a Local 10 News que se encontraba realizando diligencias junto a otro compañero de equipo.
Después de comprar varios iPhones en la tienda Apple del centro comercial Galleria Mall, los futbolistas notaron que un vehículo oscuro los seguía al salir del estacionamiento y posteriormente hasta una clínica médica ubicada al norte, sobre Federal Highway.
La Policía de Fort Lauderdale confirmó que “recibió una llamada de una víctima que creía que un vehículo la había estado siguiendo desde la cuadra 2400 de East Sunrise Boulevard”.
“Ellos estaban con su uniforme de entrenamiento”, dijo un miembro del equipo que prefirió no ser identificado. “Creo que definitivamente fueron blanco de un intento de robo”.
Agentes de la ley realizaron una parada de tráfico, durante la cual hallaron herramientas de robo y guantes de látex dentro del vehículo, que resultó ser alquilado. En el lugar también intervinieron agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (U.S. Border Patrol).
En un comunicado, la agencia informó a Local 10 News:
“Los agentes de la Patrulla Fronteriza asistieron al Departamento de Policía de Fort Lauderdale en una investigación y arrestaron a dos extranjeros ilegales de Colombia. Ambos cuentan con extensos antecedentes criminales en Estados Unidos, incluyendo robo mayor, asalto y allanamiento de morada.”
El presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, Ramón Jesurún, expresó que el sur de Florida “siempre ha sido un lugar acogedor” para la selección, que ahora mantiene su enfoque en el partido del sábado.
Las autoridades investigan si los detenidos forman parte de una organización criminal más amplia.
Un portavoz de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) confirmó que los hombres fueron procesados para deportación y permanecerán bajo custodia federal.
“Tuvimos mucha suerte de que la situación no terminara peor”, concluyó el empleado del equipo.
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