TALLAHASSEE, Fla. — La crisis de asequibilidad en Florida se perfila como la batalla decisiva de la sesión legislativa de 2026, con republicanos y demócratas presentando planes radicalmente diferentes para reducir el costo de vida. Desde la atención médica y los medicamentos recetados hasta la vivienda, los seguros y los impuestos a la propiedad, ambos partidos afirman escuchar la misma advertencia de los electores: vivir en Florida se está volviendo demasiado caro.
“Los costos se están disparando y cada vez es más difícil llegar a fin de mes”, declaró la líder de la minoría de la Cámara de Representantes, la representante Fentrice Driskell, demócrata por Tampa, en una reciente conferencia de prensa.
“Hay un verdadero desafío de asequibilidad en Florida, y debemos ayudar”, declaró el presidente del Senado, Ben Albritton, republicano por Bartow, durante un encuentro con los medios el lunes.
Los republicanos de la Cámara de Representantes están apoyando fuertemente un nuevo y amplio paquete de salud. Anunciada el martes por el presidente de la Cámara de Representantes, Danny Pérez, republicano por Miami, la legislación busca fortalecer la fuerza laboral y reducir los costos farmacéuticos.
“El liderazgo audaz del presidente Trump a través de la Ley One Big Beautiful estableció el estándar para una reforma sanitaria real y orientada a resultados, y Florida se enorgullece de liderar la implementación de esa visión a nivel estatal”, declaró Pérez en un comunicado. “Estamos tomando medidas decisivas para reducir la burocracia, aumentar nuestra fuerza laboral sanitaria, ampliar las opciones para los pacientes y proteger el dinero de los contribuyentes, a la vez que garantizamos que las familias puedan acceder a atención médica de alta calidad cuando más la necesitan. En colaboración con el liderazgo del presidente, Florida está obteniendo resultados reales”.
El representante Adam Anderson, republicano por Tarpon Springs, quien preside el subcomité de Instalaciones Sanitarias, respalda la iniciativa como complemento a nivel estatal de la Ley One Big Beautiful propuesta por la administración Trump.
“Todo el paquete está diseñado para apoyar a nuestra fuerza laboral, mejorar la calidad de la atención médica, mejorar los resultados de salud y reducir los costos, especialmente en temas como los medicamentos recetados, lo cual es un logro fundamental”, afirmó Anderson. Los críticos advierten que restringiría la elegibilidad para Medicaid, CHIP y SNAP. Al preguntársele sobre la preocupación de que los cambios pudieran dejar a las familias sin comida, Anderson replicó.
“Bueno, la verdad es que no tengo esas preocupaciones”, dijo. “Francamente, estos programas están diseñados para un propósito específico y se han desviado de él. Hay cierto abuso. Necesitamos frenar ese abuso. Necesitamos asegurarnos de que estos programas se utilicen de la forma en que fueron concebidos”.
Los republicanos también están explorando un alivio a largo plazo del impuesto predial para los residentes de Florida que residen en sus hogares. La Cámara de Representantes está planteando múltiples opciones que preservan la financiación para la educación, mientras que el gobernador Ron DeSantis está impulsando una enmienda electoral de gran alcance para eliminar gradualmente por completo los impuestos prediales para residentes de sus hogares.
El director financiero Blaise Ingoglia, republicano por Florida, dijo que apoya la visión del gobernador.
“Estoy de acuerdo con el gobernador”, dijo el designado por DeSantis. “Deberíamos tener como objetivo eliminar los impuestos prediales sobre las propiedades con residencia permanente. Esto es algo que podemos lograr en el transcurso de tres, cinco o siete años, pero debería ser el objetivo, porque coincido con el gobernador en que si eres dueño de una propiedad, no deberías seguir alquilándola”.
Los críticos, incluidos los demócratas, advierten que la idea podría reducir drásticamente los fondos para escuelas, policía y otros servicios locales.
“A pesar de que el presidente lo califica de engaño, todos vemos con nuestros propios ojos que la crisis de asequibilidad es real”, dijo la líder de la minoría del Senado, Lori Berman, demócrata por Boynton Beach.
Por otro lado, los demócratas han presentado su propio paquete de tres proyectos de ley para la asequibilidad. Una medida crearía un fondo común de riesgo de seguros de vivienda multiestatal para estabilizar el aumento de las primas. Otra busca ayudar a quienes compran vivienda por primera vez mediante incentivos y exenciones fiscales. Un tercer enfoque se centra en el gasto público mediante auditorías exhaustivas sobre partidas de alto costo, incluyendo proyectos controvertidos como el centro de detención estatal “Alligator Alcatraz”.
“Detengamos el despilfarro. Reorientemos nuestro gasto hacia cosas como escuelas y carreteras, o devolvámoslo a las familias que más lo necesitan”, dijo Driskell.
La sesión legislativa de 2026 comienza el 13 de enero. El debate en Tallahassee ya no gira en torno a si la asequibilidad es una crisis, sino en qué cura creen los votantes que realmente abaratará la vida.
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