Una mujer de 83 años dice que fue engañada por un estafador que le hizo creer que su hijo estaba en problemas.
“Me tomaron por tonto”, dijo la víctima, a quien Local 10 News no identifica. “Quiero transmitirle que esta no es la manera correcta de ganar dinero. Debería conseguir un trabajo”.
El jueves, la Oficina del Sheriff del Condado de Miami-Dade arrestó a Jason Cruceta, de 40 años y residente del centro de Miami, quien, según los agentes, estuvo involucrado en la estafa. Está acusado de fraude y robo a personas mayores.
El viernes, en la corte, la fiscal de Miami-Dade, Nessa Eth, calificó el caso de “bastante horrible”.
La mujer dijo que el mes pasado recibió una llamada telefónica de alguien que se hacía pasar por su hijo adulto y afirmaba que había tenido un accidente automovilístico y que lo habían encarcelado.
La persona que llamó le pidió que se comunicara con un abogado específico, quien resultó ser un farsante.
“El ‘abogado’ fue muy profesional y servicial e iba a hablar con el fiscal del distrito, fue muy servicial”, dijo la víctima.
La persona al teléfono le dijo que sacara $8,600 y se los diera a un mensajero que llegaría a su casa en el área de Westchester. El mensajero era un conductor de Lyft que no tenía ni idea de lo que estaba pasando.
“Enviaron a este tipo, él recogió los $8,600 y se fue”, dijo la víctima.
Los investigadores afirman que el vehículo del conductor de Lyft tenía cámaras que filmaron la entrega del efectivo a una dirección en el noroeste de Miami-Dade. Indicaron que el video ayudó a los agentes a identificar a Cruceta.
“El acusado tiene antecedentes penales bastante importantes. Parece que cumplió tres años de prisión por tráfico de drogas”, señaló Eth en el tribunal.
La víctima luego llamó a su hijo y se dio cuenta de que estaba bien.
“Me sentí feliz por un lado, pero estaba enojada, enferma y furiosa”, dijo.
Los investigadores creen que puede haber más personas involucradas y potencialmente más víctimas.
Son buenos actores. Operaban muy bien. Deberían estar en Hollywood o Broadway —dijo la víctima—.
Cruceta terminó en el Centro Correccional Turner Guilford Knight, donde debía ser liberado el viernes tras pagar una fianza de 7.500 dólares.
La víctima cuestionó el monto de la fianza, señalando que era menos dinero del que se le acusaba de robarle.
Los expertos dicen que siempre hay que ser escéptico si recibes una llamada similar.
La víctima dijo que desearía haber llamado ella misma a su hijo antes de enviarle el dinero.