ARLINGTON, Texas. — El No. 10 Miami se prepara para enfrentar al No. 2 Ohio State en el Goodyear Cotton Bowl en la víspera de Año Nuevo en el AT&T Stadium de Arlington, Texas.
Local 10 está destacando el recorrido del equipo con nuestro especial Chasing A Championship. Los televidentes pueden ver el especial a las 8 p.m. en el video en la parte superior de esta página.
Los Hurricanes vienen de una victoria 10-3 sobre Texas A&M, un partido definido por la defensa y el juego terrestre.
Miami terminó con siete capturas, la mayor cantidad que el mariscal de campo de Texas A&M, Marcel Reed, ha recibido en un juego esta temporada. Los 10 puntos de los Hurricanes también fueron la menor cantidad anotada por un equipo ganador en la historia del College Football Playoff.
La ofensiva de Miami fue liderada por el corredor Mark Fletcher Jr., quien corrió para un máximo personal de 172 yardas en 17 acarreos. Su actuación dominante fue resaltada por una carrera de 56 yardas en el cuarto cuarto que preparó el touchdown ganador del receptor Malachi Toney.
El coordinador defensivo Corey Hetherman ha remodelado la defensa de Miami en su primera temporada, convirtiéndola en una de las mejores unidades del país. Los Hurricanes cuentan con varios jugadores de impacto, incluido el ala defensiva Rueben Bain Jr., una selección proyectada de primera ronda del Draft de la NFL.
Bain registró tres capturas y cuatro tacleadas para pérdida de yardas contra los Aggies. Su compañero en la línea defensiva, Akheem Mesidor, también tuvo una sólida actuación, terminando con 1.5 capturas y cinco tacleadas mientras interrumpía constantemente las jugadas. Mesidor también generó 11 presiones totales.
El profundo novato Bryce Fitzgerald fue otro jugador destacado, al interceptar dos pases, incluida la intercepción que selló el juego en la zona de anotación. La defensa de Miami ofreció su mejor desempeño cuando más importaba y busca llevar ese impulso al Cotton Bowl.
El camino de Miami hacia una sorpresa incluye controlar la línea de golpeo con el juego terrestre.
A pesar de anotar solo 10 puntos contra Texas A&M, los Hurricanes se apoyaron en la carrera en la segunda mitad. Fletcher, quien ha anunciado que regresará la próxima temporada, fue responsable de la mayor parte de esa producción.
Limitar a los receptores abiertos de los Buckeyes, Jeremiah Smith y Carnell Tate, también será una prioridad. Smith, originario de Miami Gardens y exalumno de Chaminade-Madonna College Preparatory School en Hollywood, ha sido uno de los principales creadores de jugadas de Ohio State.
Smith atrapó 80 pases para 1,086 yardas y 11 touchdowns en 2025. Tate terminó la temporada regular regular con 838 yardas por recepción y nueve touchdowns, y sigue siendo una amenaza constante para anotar.
Mientras tanto, el entrenador de los Hurricanes, Mario Cristobal, habló sobre mantener a su equipo enfocado durante su disponibilidad con los medios el martes.
“Creo que el calendario se encarga de eso. Se levantan temprano y siempre están haciendo trabajo extra en la preparación”, dijo. “Durante el poco tiempo libre que tienen, los seniors, los jugadores de cursos superiores y el liderazgo tienen que dar un paso al frente y asegurarse de que las cosas vayan por el camino correcto”.
Cristobal también habló sobre el mariscal de campo Carson Beck, señalando que se desarrollaron narrativas debido a su limitada presencia en los medios en ese momento.
“Como es tan callado y no tuvo mucho tiempo frente a los medios, algunas narrativas siguieron su propio curso”, dijo Cristobal. “Él está enfocado en el equipo, en sus compañeros, y su ética de trabajo es extraordinaria. Le tengo el mayor respeto y confianza, y creo que sus mejores días están por delante”.
Jugar sin entregar el balón será fundamental para Beck.
Beck lanzó para 103 yardas en 20 intentos en condiciones ventosas contra Texas A&M y no cometió ninguna pérdida de balón. Evitar errores será clave contra Ohio State, ya que Miami llega al partido como desfavorecido por 9.5 puntos.
Smith reconoció a principios de esta semana sus vínculos de reclutamiento con Miami.
“Probablemente habría terminado yendo a Miami si las cosas hubieran estado encaminadas en ese momento”, dijo Smith a los reporteros el lunes antes del Cotton Bowl. “Pero decidí quedarme con Ohio State”.
El juego terrestre de Ohio State también ha sido efectivo. Bo Jackson superó las 1,000 yardas por tierra con un promedio de más de seis yardas por acarreo. C.J. Donaldson lidera a los Buckeyes en touchdowns por carrera con 10.
El mariscal de campo de Ohio State, Julian Sayin, ha registrado números sólidos esta temporada, completando el 78% de sus pases para más de 3,300 yardas, con 31 touchdowns y seis intercepciones.
La principal preocupación ofensiva de los Buckeyes ha sido su línea ofensiva, particularmente por el lado derecho. No se espera que el guardia derecho Tegra Tshabola juegue, y se anticipa que Gabe VanSickle lo reemplace.
Ohio State jugó por última vez el 7 de diciembre, cayendo 13-10 ante Indiana en el juego por el campeonato de la Big Ten. Miami espera que el tiempo de inactividad de los Buckeyes juegue a su favor.
El saque inicial del Cotton Bowl está programado para las 7:30 p.m. del miércoles.
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