MIAMI BEACH, Fla. — Los miembros de una organización sin fines de lucro de Miami que alienta a las personas negras a participar en el activismo de la comunidad, celebraron una conferencia de prensa fuera del Departamento de Policía de Miami Beach para responder a las recientes detenciones violentas en el Hotel Royal Palm en South Beach.
El sargento de la policía de Miami Beach, José Pérez, el oficial Kevin Pérez, el oficial Robert Sabater, el oficial David Rivas y el oficial Steven Serrano fueron suspendidos con sueldo y se enfrentan cada uno a un cargo de delito menor de agresión.
“Estos cargos son tan débiles como el vino de la iglesia”, señaló a los periodistas el director ejecutivo de Circle of Brotherhood, Lyle Muhammad.
Muhammed señaló que se estaban reuniendo con el jefe de policía de Miami Beach, Richard Clements, y que habían solicitado una reunión con la fiscal estatal de Miami-Dade, Katherine Fernández Rundle. Señaló que los cargos y las citaciones no reflejaban la naturaleza de la violencia captada en el vídeo y que la “cultura policial” debe ser “redefinida” con más formación.
“Esto es algo que revivimos una y otra vez”, lamentó Muhammad: “Quiero ver a esos oficiales esposados”.
VEA: Rueda de prensa del Círculo de la Hermandad
Fernández Rundle anunció los cargos el lunes y dijo que podrían presentarse más cargos relacionados con las detenciones del 26 de julio.
Los agentes detuvieron a tres turistas en el hotel Royal Palm poco antes de las 2 de la madrugada: Dalonta Crudup, de 24 años, de Kentucky, y Khalid Vaughn, de 28 años, y Sharif Cobb, de 27 años, ambos de Nueva York. Crudup fue objeto de una persecución policial. Vaughn y Cobb se encontraron con la violenta detención de Crudup en el vestíbulo del hotel.
William DC Clark, veterano de 28 años del Departamento de Bomberos de Miami-Dade y miembro del Círculo de la Hermandad, señaló que hubo oficiales que vieron la violencia y no intervinieron para “desescalar” la situación. Dijo que cada oficial “que jugó un papel en la situación ese día” debería ser suspendido, despedido o degradado.
“La mayoría pueden ser buenos oficiales, pero es hora de que esos buenos oficiales tomen una posición”, exigió Clark.
Fernández Rundle acusó al sargento José Pérez por dar tres patadas a un Crudup esposado. Acusó al oficial Kevin Pérez por patearle al menos cuatro veces. Aclaró que los Pérez no están emparentados. También acusó a Sabater, Rivas y Serrano por sus acciones durante la detención de Vaughn.
Fernández Rundle mostró a los periodistas el vídeo de las cámaras de vigilancia del hotel y las cámaras corporales de los agentes sobre las detenciones de Vaughn y Crudup, pero no mencionó la detención de Cobb.
“Cuando esas cosas se ignoran como parte de la cultura, no esperamos que se aborden”, dijo Muhammad sobre los funcionarios que no reconocen públicamente la detención de Cobb.
El Círculo de la Hermandad permitió a Tangela Sears, consultora política, que dirige Florida Parents of Murdered Children, una organización sin ánimo de lucro que defiende a las familias en duelo, hablar también con los periodistas durante el acto. Dijo que la violencia policial y la forma en que Clements y Fernández Rundle respondieron a ella eran inaceptables.
“Cuando entramos en contacto con este tipo de oficiales, tienen que ser despedidos inmediatamente y el Fiscal del Estado tiene que acusarlos de un cargo de delito grave y debe haber un proceso en los tribunales en su lugar”, reclamó Sears. “Deberían ser encarcelados”.
Sears también pidió a los legisladores de Florida que aborden el tema de la policía en la Carta de Derechos del estado y que creen una base de datos de agentes en casos de uso excesivo de la fuerza, “para que incluso cuando sean despedidos no sean contratados por otro departamento.”
“Ya es suficiente”, dijo Sears.
El Departamento de Aplicación de la Ley de Florida se encarga de las certificaciones de los agentes de policía.
Sears, Muhammed y otros miembros del Círculo de la Hermandad se reunieron a las 12 p.m. frente a la sede del Departamento de Policía de Miami Beach en el 1100 de la avenida Washington. Clements y Fernández Rundle no estaban allí para responder a sus quejas.
Un portavoz de Miami Beach emitió esta declaración: “El Jefe y su personal se reunieron con el Círculo de la Hermandad esta tarde. Tuvieron una conversación significativa y positiva, que es una parte clave para seguir adelante. La MBPD sigue comprometida a garantizar que la investigación siga el proceso adecuado.”
Ver la conferencia de Fernandez Rundle:
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