LA PAZ – El presidente de Bolivia, Luis Arce, celebró el lunes el Año Nuevo Andino 5529 con pedidos de salud y para que la nación sudamericana pueda vencer la pandemia del nuevo coronavirus.
El mandatario asistió a tempranas horas a las ruinas arqueológicas de Tiwanaku, a unos 80 kilómetros de La Paz, para tomar los primeros rayos de sol en un acto de celebración reducido para evitar nuevos contagios.
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“Venimos a Tiwuanacu con mucha humildad, con mucho respeto para pedir este Año Nuevo Andino mucha salud para el pueblo boliviano”, expresó el gobernante de izquierda.
Utilizando mascarillas, los brujos aymaras y demás asistentes realizaron los ritos ancestrales a la Pachamama (Madre Tierra) e hicieron sus exhortaciones para que este año el país pueda vencer el COVID-19.
“Estamos viviendo tiempos muy difíciles por la pandemia y (ojalá) podamos volver a la normalidad... (Nosotros) más que todo pedimos salud”, señaló a The Associated Press Teófilo Mendoza, un indígena aymara.
“Como estamos viviendo tiempos difícil por la pandemia, el pedido que hacemos al Tata (padre) Inti al dios Sol es que vuelva la normalidad... sobre todo salud”, mencionó María Quisbert, una asistente al acto.
La celebración del Año Nuevo Andino 5529 —llamada también willkakuti (retorno del sol en aymara— tiene rango de fiesta nacional en Bolivia y es celebrada con el nombre de Inti Raymi (fiesta del sol en quechua) en países vecinos.
Las Naciones Unidas mediante una resolución el año pasado declaró el 21 de junio como “Día Internacional de Celebración del Solsticio” desde 2019.
Bolivia pasa por una tercera ola de contagios. Hasta ahora, el país andino registra 422.047 casos y 16.132 decesos.
La semana pasada el país registró una leve reducción de casos, pero las autoridades advierten que se espera que en las próximas semanas las infecciones se disparen debido en parte a la temporada de invierno.
Mientras la campaña de vacunación marcha con retrasos, según los expertos. De acuerdo con el Ministerio de Salud se ha aplicado entre la primera y segunda dosis de cuatro vacunas diferentes a más de dos millones de personas, de las 7,5 millones por inmunizar.