MIAMI, Fla. – Mandy Karnauskas es una de las vecinas de la obra de construcción de Una Residences, frente al mar, en el barrio de Brickell, en Miami, que ha declarado que hay grietas en el hormigón y que el suelo parece moverse.
Las preocupaciones de los residentes llevaron a los funcionarios de la ciudad a examinar más de cerca el sitio de construcción de Una Residences, una torre de 47 pisos con 135 unidades.
El jueves se celebró una reunión pública para dar a conocer los resultados de la evaluación de la ciudad. Karnauskas, que vive en el Brickell Townhouse, dijo que los residentes temen las consecuencias futuras.
“Los daños que vamos a ver en el futuro, las evaluaciones especiales que vamos a ver en el futuro, no creo que vayamos a ver edificios cayendo al suelo mañana”, dijo Karnauskas.
Los funcionarios informaron de que tienen algunas preocupaciones con el aparcamiento al sur de la torre, donde hay algunas paredes muy agrietadas, y encontraron daños estructurales en el edificio al este de Una Residences.
Los trabajos de construcción se suspendieron temporalmente después de que los testigos informaran de que el agua salía a la superficie en dos ocasiones. Esto hizo temer el impacto sobre la propiedad y la erosión del suelo. Karnauskas y otros residentes consideraron que la reunión pública del jueves no sirvió para aliviar sus crecientes preocupaciones.
“En realidad, no hemos oído nada sobre lo que han hecho o lo que han encontrado”, dijo Karnauskas. “Fue muy superficial esta mañana. No nos dieron muchos detalles”.