PALM BEACH COUNTY, Fla. – Casi una docena de tiburones toro fueron asesinados el pasado fin de semana en un concurso para ver quién atrapaba el más grande.
La matanza de estos animales puede tener un enorme impacto negativo en nuestros océanos y los críticos están denunciando el torneo de pesca de tiburones, a pesar de que todo se llevó a cabo de forma legal.
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Un total de 11 tiburones toro maduros fueron cazados y asesinados, todo en nombre de la ciencia.
“Estamos empezando a llegar a un punto en el que hay un desequilibrio, en el que hay demasiados tiburones en este momento”, dijo Robert “Fly” Navarro.
Además de ser uno de los organizadores del torneo, Navarro es también un promotor de concursos de pesca deportiva que casualmente forma parte del Panel Asesor de Especies Altamente Migratorias del Atlántico de la NOAA.
Dice que lleva seis años llamando la atención sobre lo que él llama un aumento de la población local de tiburones e insiste en que este torneo era necesario.
“Aquí es donde me gano la vida, me gano la vida en el agua”, dijo Navarro. “Y uno de mis argumentos al respecto es que estamos empezando a llegar a un punto en el que estamos perdiendo el 50% de lo que enganchamos a los tiburones”.
El año pasado, la NOAA concedió una subvención de 195,000 dólares a la Universidad Atlántica de Florida para que trabajara con los pescadores locales en el estudio del aumento de la depredación que se registra cuando los tiburones atrapan las capturas de los pescadores antes de su desembarco.
El Dr. Matt Ajemian de la FAU y su equipo estuvieron presentes en el pesaje del torneo, tomando muestras de los tiburones muertos.
“Se nos acercó ya que querían donar los cadáveres del torneo, querían tener algún tipo de valor científico asociado a ello, así que nos ofrecimos”, dijo Ajemian. “Hay ciertos tipos de tejidos que no se pueden obtener de animales vivos”.
En el torneo también había un conservacionista que fue invitado a las instalaciones, recibió en el pesaje y compartió vídeos con Local 10 News.
“Soy biólogo y crecí aquí en el sur de Florida. Crecí en la pesca deportiva”, dijo el conservacionista. “Lo que presencié fue exactamente lo que esperaba, es decir, gente excitada por matar animales sin motivo. Gente difundiendo mentiras sobre el número de tiburones que hay”.
Las reglas del torneo se ajustaban a la ley de Florida, que dice que los pescadores sólo pueden capturar legalmente tiburones toro; uno por persona o dos por embarcación, lo que sea menor.
Pero, ¿se trataba realmente sólo de ciencia?
Las publicaciones de Facebook en la página del grupo revelaron algunas de las verdaderas intenciones de los pescadores. Un mensaje decía: “Matar todos los días posibles, por favor”. Otro decía: “Grandes o pequeños, mátalos a todos”.
Ryan Walton fue uno de los muchos conservacionistas con los ojos puestos en el agua durante el torneo, asegurándose de que todo el mundo cumpliera las normas.
Los pescadores de una embarcación fueron atrapados golpeando a un tiburón arenero protegido. Su captura es ilegal en Florida, al igual que arrastrar un tiburón hasta que muera, incluso un tiburón toro. Uno de los pescadores se jactó de haberlo hecho, diciendo que arrastró al tiburón toro durante dos horas hasta que finalmente murió.
“Lo llaman torneo, pero en realidad es una matanza”, dijo Walton. “No es la primera vez que lo vemos. Lo que es una locura es que es legal todos los días de la semana aquí en Florida”.
“Se trata de una matanza malintencionada por parte de individuos que se han dado cuenta de que, a través del Estado de Florida, el tiburón toro es una especie legal para atrapar”, continuó Walton. “Así que se han aprovechado de ello y están haciendo todo lo posible para acabar con ellos”.
También vigilaba las aguas el operador de buceo con tiburones Luis Román.
“No hay tantos tiburones”, dijo. “La gente se queja de que los tiburones se están comiendo mi pescado y todas esas cosas, pero la realidad es que, cuando hay sobrepesca, hay menos peces para que coman, y (los tiburones) tienen que comer”.
Desde el comienzo de la pandemia de COVID-19, Florida cuenta con un récord de más de 1,000,000 de embarcaciones registradas.
“Ha habido un gran auge en la presión de la pesca recreativa”, dijo Ajemian. “Esa combinación está creando algunas de estas interacciones intensas. Es muy difícil decir cuántos tiburones hay ahí fuera”.
Así que Navarro espera que esto impulse ahora una nueva evaluación de las poblaciones de tiburones.
“Mi trabajo es simplemente informar al gobierno federal, ‘oye, estamos empezando a tener un desequilibrio aquí’”, dijo Navarro.
Pero para los activistas de los tiburones, como Cade, de 14 años, esto debería servir de llamada de atención a todos los que se preocupan por el océano.
“Cinco, diez tiburones, no importa si es un tiburón o diez tiburones, seguirá teniendo un impacto”, dijo Cade. “Es un animal que necesitamos. Mantienen nuestros ecosistemas sanos, se comen a todos los peces enfermos y heridos, y mantienen nuestros océanos bajo control. Si eliminas a los tiburones, todo el ecosistema se derrumba”.
Un total de 54 barcos participaron en el torneo, pero sólo 13 volvieron para el pesaje. Al final, no se consumió ninguna carne de tiburón, pero las mandíbulas se las llevaron como trofeos.
Pero no las aletas, ya que eso es ilegal en Florida.
Navarro dice que también se atraparon, marcaron y liberaron unos 150 tiburones más, pero esas son sus cifras.
El tiburón toro es una especie casi amenazada, por lo que este verano hay más torneos de pesca de tiburones en otros estados. El próximo comienza el viernes en Alabama.
Los que quieran hacer oír su voz sobre este asunto, pónganse en contacto con las pesquerías de la FWC y la NOAA.
Para las pesquerías de la FWC, haz clic aquí.
Para las pesquerías de la NOAA, haz clic aquí.