MIAMI, Fla. – Un hombre de 52 años se enfrenta a un cargo de conducta lasciva pues la policía de Miami lo acusa de solicitarle actos indebidos a una niña de 11 años sentada dentro de una tienda Home Depot en el barrio de la Pequeña Habana de la ciudad.
Según un informe policial, la niña estaba esperando a que sus padres terminaran de comprar el domingo por la tarde en la tienda, situada en el 3030 SW de la calle Octava, cuando Jorge Alberto Reyes-Jiménez se le acercó, se sentó frente a ella y le preguntó si sus padres estaban cerca.
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Reyes-Jimenez, que también reside en la Pequeña Habana, preguntó entonces a la niña si “le gustaban los hombres mayores” y luego le pidió a la niña de 11 años, que llevaba un vestido, que “abriera las piernas”, diciéndole que “nadie se iba a dar cuenta”, dice el informe.
La niña estableció contacto visual con una empleada y le hizo señas para que la ayudara, según la policía. Tras contarle lo sucedido, la empleada se puso en contacto con un agente de policía de Miami que no estaba de servicio.
El empleado dijo a los agentes que Reyes-Jiménez estaba “sentado frente a la víctima y miraba directamente entre sus piernas y se movía para colocarse mejor y ver por encima de su vestido”, según el informe.
La policía dijo que la chica no conocía a Reyes-Jiménez.
Reyes-Jiménez dijo a la policía que estaba “en el teléfono escuchando grabaciones de audio y hablando consigo mismo sobre lo que estaba oyendo” en ese momento, según el informe, pero dijo que “recuerda haber preguntado a la víctima si estaba sola, si le tenía miedo y si quería que se fuera”.
“(Reyes-Jiménez) declaró que nunca le pidió que abriera las piernas, pero que existía la posibilidad de que dijera algo de esa naturaleza, pero que no habría sido dirigido hacia ella”, escribió la policía.
Reyes-Jiménez estaba detenido en el Centro Correccional Turner Guilford Knight bajo una fianza de 7,500 dólares, según los registros de la cárcel.