CHARLESTON, SC. – Un novio de Carolina del Sur, cuya novia murió el día de su boda a manos de una presunta conductora ebria, compartió su historia por primera vez el viernes.
Tras hablar en exclusiva con ABC News en su primera entrevista desde que perdió a su esposa, Aric Hutchinson recordó la tragedia ocurrida la noche de su boda, hace tres semanas.
La noche del 28 de abril, un carrito de golf en el que viajaban cuatro personas fue embestido por detrás por una presunta conductora ebria cerca de Charleston, matando a Samantha Hutchinson, de 34 años, e hiriendo de gravedad a Aric Hutchinson y a otras dos personas cuando salían del banquete de su boda, según informó la policía.
“Todavía estoy intentando hacerme a la idea, esa noche, pasando de un máximo histórico a un mínimo histórico, es bastante duro intentar comprenderlo”, dijo.
Los recién casados fueron despedidos por sus invitados con una ola de bengalas, saltando en un carrito de golf con la familia, pero nunca llegaron a casa.
A Hutchinson le preguntó la reportera de ABC News, Eva Pilgrim: “¿Qué fue lo último que te dijo?”.
“Lo último que recuerdo que me dijo fue que quería que la noche no acabara nunca”, respondió Hutchinson.
A poca distancia de su recepción, el grupo viajaba en un carrito de golf cuando fue chocado por un auto.
Hutchinson, su cuñado y su sobrino fueron trasladados a un hospital cercano y las autoridades explicaron que Samantha Hutchinson murió en el lugar.
“Recuerdo que me desperté un poco confusa, fuera de mí, y pude ver la cara de mi madre. Se notaba que algo iba mal y le pregunté: ‘¿Dónde está Sam? ¿Dónde está Sam?’ y entonces fue cuando me dijo que había habido un incidente y que Sam no lo había logrado”.
Los investigadores dicen que la conductora del vehículo, Jamie Lee Komoroski, de 25 años, conducía a 65 millas por hora en una zona de 25 millas por hora en el momento del accidente.
Según el informe toxicológico, el nivel de alcohol en sangre de Komoroski era más de tres veces superior al límite legal.
Según los registros de la corte, Komoroski se enfrenta a cargos por conducir ebria y homicidio imprudencial.
Pilgrim: ¿Hay algo que le diría a la conductora?
Hutchinson: “No. Ahora mismo no puedo. Ella robó algo. Robó a un ser humano increíble que no debería haberse llevado”.
Hutchinson presentó el miércoles una demanda por homicidio culposo contra Komoroski y varios bares y restaurantes locales donde supuestamente bebió la noche del accidente.
Los registros de la corte muestran que el empleador y el supervisor de Komoroski también han sido demandados, por presionarla para que asistiera a un acto y por consumir cantidades excesivas de bebidas alcohólicas.
El empleador de Komoroski dijo en un comunicado que no había “ninguna función de empleados organizada oficialmente en torno a la bebida” y que ella acababa de empezar a formarse para el trabajo.
“Este es un caso sobre la protección de las comunidades frente a la conducción bajo los efectos del alcohol y cuando a alguien se le sirve en exceso y luego se le permite salir y subir al coche no es responsable. Tendrán que rendir cuentas por ello”, dijo Danny Dalton, abogado de Hutchinson.
Hutchinson dijo a ABC News que se lo está tomando día a día y centrándose en parte en su recuperación mientras intenta aferrarse a los recuerdos felices con su esposa.
De vuelta a casa, en su apartamento del tercer piso, Hutchinson dice que aún siente su presencia.
“Es duro, pero también es agradable. Tiene a Sam escrito por toda la casa. Es agradable estar aquí y tener buenos recuerdos”.
