PALMETTO BAY, Fla. – Es posible que Damont Ellis pusiera los ojos en blanco cuando los oficiales de la cárcel de Miami-Dade le tomaron una foto el lunes por la noche, pero los cargos a los que se enfrenta son bastante graves.
El joven de 18 años del suroeste de Miami-Dade se enfrenta a una docena de delitos graves por embestir a varias patrullas de agentes con un Corolla robado después de que lo vieran en un McDonald’s de Palmetto Bay e intentaran detenerlo.
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Según un informe de arresto, dos detectives de la policía de Miami-Dade vieron el Toyota que había sido robado alrededor de las 8 de la noche del lunes, en el Golden Arches en 18295 S. Dixie Highway, y trataron de detenerlo.
Después de que los agentes encendieron sus luces de emergencia, la policía dijo que Ellis puso el auto en reversa, golpeó el coche de los detectives y luego huyó hacia el norte por la U.S. 1.
La policía señaló que Ellis no había terminado de jugar a los carritos chocones. Dijeron que después de que los agentes le alcanzaran en el cruce de Banyan Street, volvió a poner el coche marcha atrás, golpeando un automóvil en el que viajaban otros dos agentes y, a continuación, golpeó a más patrullas.
Más tarde, los agentes detuvieron a Ellis, lo arrestaron y lo llevaron al centro penitenciario Turner Guilford Knight, donde su ficha policial lo mostraba aparentemente imperturbable por enfrentarse a siete cargos de agresión a un agente de la ley, un cargo de fuga y elusión, dos cargos de robo de vehículo y un cargo de hurto mayor en primer grado.
Ellis, que vive a las afueras de Cutler Bay, también tenía órdenes de detención por conducción temeraria, abandono del lugar del accidente y conducción sin licencia.
Su fianza se fijó en unos $82,000 dólares y permanecía entre rejas hasta este martes por la noche.