FORT LAUDERDALE, Fla. – Un juez federal de Fort Lauderdale condenó el miércoles a 30 años de prisión a un antiguo trabajador de Royal Caribbean Cruise Line por colocar múltiples cámaras ocultas en las habitaciones de los huéspedes, grabando a víctimas entre las que había niños de tan sólo 2 años, según informó la fiscalía.
Arvin Joseph Mirasol, ciudadano filipino de 34 años, se había declarado culpable de producir material de abuso sexual infantil, según un comunicado de prensa del Departamento de Justicia de EE.UU.. Fue detenido en marzo por agentes del condado de Broward tras el regreso del Symphony of the Seas a Port Everglades, en principio por cargos estatales. Royal Caribbean despidió a Mirasol.
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Las autoridades declararon que había sido detenido en alta mar por agentes de seguridad del barco después de que una mujer y sus dos hijas pequeñas descubrieran una cámara oculta en su cuarto de baño el 25 de febrero, un día después de zarpar del sur de Florida.
Los investigadores declararon que el camarero admitió haber espiado en serie a las jóvenes desde que empezó a trabajar en el Symphony of the Seas en diciembre.
Mirasol admitió haber colocado cámaras ocultas en varias habitaciones, según los documentos judiciales. Los investigadores dijeron que encontraron videos en una memoria USB perteneciente a Mirasol que contenían “numerosos videos de mujeres desnudas desvistiéndose en el baño, así como videos de pornografía infantil”.
Uno de los videos descritos en la denuncia penal federal era de una niña, que parecía tener 10 años, desnudándose y duchándose, sus genitales “claramente visibles” y “el foco del video”.
Las autoridades dijeron que también encontraron múltiples búsquedas relacionadas con voyeurismo en el teléfono de Mirasol, incluyendo “adolescente en la cama.”
“Quiero controlarlo, pero no puedo”, dijo a los investigadores federales, según los documentos de acusación.
Cuando le preguntaron cómo decidía en qué habitaciones colocar las cámaras, los investigadores afirmaron que Mirasol les dijo: “Si me gusta quién está en esa habitación, la coloco”, afirmando que elegía a chicas adolescentes de 16 años o más.
Admitió saber que hacerlo era ilegal, según las autoridades, y «también declaró que mientras las huéspedes se duchaban, él entraba en las habitaciones y se escondía debajo de la cama mientras las grababa desnudas con su dispositivo móvil”.
Las autoridades animaron a cualquier persona que sospeche que ha sido víctima de un delito en un crucero, incluidos los abusos sexuales y el material de abuso sexual infantil, a ponerse en contacto con la línea de denuncias de Homeland Security Investigations en el 1-866-347-2423.