CARACAS – El gobierno del presidente Nicolás Maduro exigió el lunes a Estados Unidos la entrega de 18 niños a sus familiares en Venezuela, luego de que sus padres fueran deportados y los menores quedaran bajo custodia en territorio estadounidense.
El reclamo tiene lugar casi siete semanas después de la entrega de Maikelys Espinoza, de dos años, hija de migrantes venezolanos que permaneció en Estados Unidos después que las autoridades de ese país deportaran a sus padres.
Recommended Videos
Jorge Rodríguez, cercano colaborador de Maduro y presidente de la Asamblea Nacional, dijo que recibió instrucciones del mandatario para que “recurramos a todos” los mecanismos establecidos en las distintas organizaciones multilaterales hasta lograr la entrega de los niños, así como “recuperamos a Maikelys", quien retornó al país el 14 de mayo en un vuelo de migrantes deportados desde la nación norteamericana.
En una declaración difundida por la estatal Venezolana de Televisión, Rodríguez denunció que Estados Unidos mantiene “secuestrados” a esos menores que fueron separados de sus padres y “llevados a instituciones donde no deberían estar”. El legislador no ofreció detalles.
La llegada de Maikelys se produjo 13 días después de que Maduro pidió que fuera enviada a Venezuela. El gobernante condenó la decisión de las autoridades estadounidenses de dejar a la niña con una familia de acogida, luego de deportar a sus progenitores.
El gobierno estadounidense alegó que la separación familiar estaba justificada porque los padres de la niña presuntamente tienen vínculos con la pandilla venezolana Tren de Aragua, designada como organización terrorista por la administración del presidente Donald Trump a principios de este año.
De acuerdo con las autoridades de Estados Unidos, la niña estaba bajo el cuidado y custodia de la Oficina de Reubicación de Refugiados y con una familia de acogida.
La niña fue separada de su madre el 25 de abril cuando esta fue deportada a Venezuela. Su padre ya había sido deportado a El Salvador en marzo y permanece allí desde entonces en una cárcel de máxima seguridad, según los abogados de la familia.
Maduro ha prometido traer de regreso al padre de Maikelys y a los 253 venezolanos que están en El Salvador.
El gobierno venezolano se había negado por años a la entrada de inmigrantes deportados desde Estados Unidos. Sin embargo, desde que Trump asumió el cargo en enero, centenares de migrantes venezolanos, incluidos unos 180 que pasaron hasta 16 días en la base naval estadounidense de la Bahía de Guantánamo, Cuba, han sido deportados a su país de origen.
El gobierno de Trump ha afirmado que los venezolanos enviados a Guantánamo y El Salvador son miembros del Tren de Aragua, pero ha presentado pocas pruebas que respalden esa acusación.