CONDADO DE MIAMI-DADE, Fla. – Las bajas temperaturas alcanzaron los 30 grados en algunas partes del sur de Florida cuando el domingo por la mañana trajo uno de los climas más fríos que hemos visto en años.
Kendall, en el condado de Miami-Dade y Boca Raton, en el condado de Palm Beach, fueron dos de las áreas que vieron temperaturas por debajo de los 40.
El mínimo de la ciudad de Miami fue de 42 grados el domingo por la mañana, mientras que Homestead, Pembroke Pines, Fort Lauderdale y Pompano Beach registraron un mínimo de 40 grados.
Incluso con la hermosa luz del sol y los cielos despejados, el sur de la Florida aún se despertó con un clima fresco gracias a las ráfagas de viento en el rango de 12 mph.
Se pronostica que las altas temperaturas alcanzarán los 60 y los 50 según el lugar de la ciudad en el que se encuentre, por lo que es un buen día para sacar esas sudaderas con capucha y calcetines cómodos.
A lo largo de Ocean Drive en Miami Beach el domingo, calentadores estaban fuera para que clientes pudieran comer al aire libre.
Si le preguntas a personas que son de estados más fríos, te dirán que el frío del domingo no fue una broma.
“Me siento como si estuviera en Nueva York”, dijo un visitante de Nueva York. “Mírame. Tengo una sudadera con capucha. Tengo estas prendas grandes”.
Mientras que algunos se abrigaron, otros no fueron afectados por las bajas temperaturas.
“Sí, me encanta”, dijo Federico Lang, que está de visita desde Europa. “Yo prefiero estar aquí que en Europa”.
Claire Monyard estaba de visita desde Canadá.
“Soy de Canadá, así que realmente no hace frío para mí”, dijo.
Con temperaturas que se pronostican para alcanzar tan sólo 30 grados, un mínimo récord desde diciembre de 2010, las organizaciones de personas sin hogar invitaron a los más vulnerables de la comunidad a refugios, proporcionando elementos esenciales como mantas, alimentos y vacunas COVID-19.
El frío también preocupaba a los agricultores, que temían que sus cosechas fueran destruidas.
Afortunadamente, la mayoría de sus productos parecían sobrevivir.
“No es tan malo como podría haber sido”, dijo Charles LaPradd, gerente agrícola del condado de Miami-Dade. “Afortunadamente, esta fue una masa de aire más seca que salió”.